En un giro trágico durante las labores de búsqueda de las hermanas Delfina y Pilar Heker, de 1 y 5 años, desaparecidas tras el devastador temporal que azotó Bahía Blanca, se confirmó el hallazgo del cuerpo sin vida de Rubén Zalazar, el conductor de una camioneta de encomiendas que había intentado auxiliarlas. El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Javier Alonso, fue quien brindó la confirmación este domingo, señalando que Zalazar se convirtió en una figura clave en la búsqueda de las niñas, ya que fue la última persona en tener contacto con ellas antes de que desaparecieran.
Rubén Zalazar, quien manejaba una camioneta de la empresa Andreani, se convirtió en la víctima fatal número 16 del temporal que causó estragos en la ciudad bonaerense. Según relató el cronista de C5N, Leo García, Zalazar intentó ayudar a la familia Heker cuando su auto fue arrastrado por una fuerte correntada. «Cuando la camioneta del correo ve que están arrastrando el auto, intentan acercarse al lugar para asistirlo. La correntada que provocó que la camioneta quedara lejos, hizo que la mujer con las dos chiquitas quedaran flotando», narró García.
Este hallazgo ha profundizado el dolor y la preocupación en la comunidad de Bahía Blanca, que sigue esperando noticias sobre el paradero de las dos hermanitas. La desaparición de Delfina y Pilar, sumada a la muerte de Zalazar, ha dejado en evidencia la magnitud de la tragedia que ha afectado a la región, con inundaciones, daños materiales y pérdidas humanas que han conmocionado a todo el país.
Las labores de búsqueda continúan sin descanso, con la esperanza de encontrar con vida a las niñas, mientras las autoridades y los equipos de rescate trabajan en condiciones extremas para dar con su paradero. La historia de Rubén Zalazar, quien perdió la vida intentando salvar a otras personas, ha sido destacada como un acto de heroísmo en medio de la catástrofe, recordándonos la importancia de la solidaridad y el coraje en momentos de crisis.