Tras casi un mes de angustia y hospitalización, Thiago Medina finalmente recibió el alta del Hospital Mariano y Luciano de la Vega en Moreno. El influencer de 22 años, que sufrió un grave accidente de moto el 12 de septiembre, superó múltiples complicaciones y varias cirugías, logrando una recuperación que le permitió, este jueves, abandonar la terapia intensiva y salir del hospital por la puerta principal.
La salida del centro de salud se convirtió en un emotivo momento, acompañado de aplausos, cánticos de apoyo y destellos de cámaras de prensa. Thiago estuvo rodeado de su hermana Camila Deniz y el resto de su familia, esforzándose por sonreír y saludar. “Ya está, me estoy yendo a casa. Soy libre”, expresó con alegría a los periodistas, mostrando su emoción por este esperado momento.
En sus primeras declaraciones, Thiago compartió los pensamientos que lo acompañaron durante su difícil recuperación. “Cuando me desperté, lo primero que pensé fue en tomar agua y, cuando recibí el alta, en ver a mis hijas”, confesó, dejando ver su lado más humano y afectuoso como padre.
Respecto a cómo lo impactó la experiencia, afirmó de manera directa que el accidente lo transformó: “Muchas cosas, te cambia la manera de pensar, de disfrutar la vida”, reflexionó, destacando la importancia de valorar cada instante.
Sobre los rumores que circularon acerca de una supuesta propuesta de matrimonio a Daniela Celis, su expareja y madre de sus hijas, Thiago aclaró: “No, nunca lo dije. Si se da más adelante, se va a ver en las redes. Pero bueno, estamos acá”, optando por centrarse en el presente sin cerrar la puerta a un futuro posible.
Su principal preocupación sigue siendo sus hijas Laia y Aimé. “Pensé mucho en ellas, en querer estar en casa. Ahora veremos qué pasa, el día a día, me tengo que reponer todo, hacer reposo por el choque, pero estamos mejor. Ahora me voy a ver a mis bebés que son lo que más quiero en el mundo”, aseguró, dejando claro que su prioridad absoluta son sus pequeñas.
Thiago también agradeció al personal médico que lo atendió durante su internación: “Estuvieron atentos a todo lo que necesité, si me dolía algo, estaban apoyando”, señaló, y también se dirigió a sus seguidores: “Muchas gracias por haberme apoyado, por seguirme y acompañarme en todo este proceso que fue tan duro”.
En síntesis, Thiago resumió su gran motivación durante estos días: “No tenía miedo, me quería recuperar rápido para ir a mi casa. Ya está la moto, nada más. Quiero ver a mis hijas y estar con ellas”.
La recuperación del joven fue posible gracias al trabajo comprometido del equipo médico del hospital, que incluyó especialistas en terapia intensiva, cirugía, kinesiología, clínica médica y enfermería. Cada profesional participó activamente en las intervenciones, tratamientos diarios y acompañamiento constante a Thiago y su familia, celebrando cada pequeño avance hasta el esperado momento de su alta.