Gritos, amenazas y gente ahogada. Bajo ese marco transcurrió el abrupto final de una fiesta organizada por un reconocido espacio cultural de la comunidad LGBTQ en un boliche del centro de la ciudad de Buenos Aires. Allí, dos jóvenes violentos rociaron con gas pimienta a los asistentes, en medio de consignas machistas e insultos homofóbicos. Finalmente, huyeron.
La absurda agresión ocurrió ayer en horas de la madrugada en el Bar Dark, ubicado en la Avenida de Mayo al 900, un histórico reducto de la cultura gótica donde ocurrían las previas de la discoteca Requiem. Según relataron los referentes del evento -llamado “Lunes de Caramelo”- en sus redes sociales, fueron sorprendidos hacia las 4 por dos individuos que pasaron por el frente del lugar y, sin motivo alguno, comenzaron a insultar a parte de los jóvenes que estaban sobre la vereda.
“Comenzaron a agraviar a parte de los amigos y amigas que estaban sentados en la vereda disfrutando de un momento como cualquier otro… Entre amigos, risas, cerveza y tragos, lo de siempre. Estos sujetos comenzaron a gritarles, a decirles a algunos compañeros que se tenían que hacer hombre, que cómo no les gustaban las mujeres, que eran anormales y se iban a ir al infierno”, relataron.
El tenso momento fue filmado los asistentes del evento. De acuerdo con al posteo en las redes sociales, y con lo que se observa en el video, algunos quisieron apaciguar la escalada de violencia para que no pasara a mayores. Lo único que le pedían al par de violentos era que se fueran. Sin embargo, no hubo caso. Los agresores -vestidos de traje, camisa y corbata- continuaron con los insultos y amenazas cada vez más subidas de tono.
“No toqués a un macho argentino”, le gritó uno de los individuos a un joven que intentaba dialogar con él. Además, le advirtió que “era del Ejército Argentino”. Al lado suyo, estaba su cómplice, un joven que los amenazó con “meterlos a la cárcel” porque era “hijo de un juez de la Corte Suprema” y, además, lo favorecía el hecho de que era -supuestamente- oriundo de Francia.“Viva la libertad carajo”, fue otra de las frases que el autodenominado europeo les gritó.
Al escuchar la insólita advertencia, varios de los asistentes a la fiesta se rieron y fue ahí cuando el agresor los roció con el gas pimienta. Algunos de los jóvenes comenzaron a toser fuertemente, mientras que otros tuvieron dificultades para respirar. Incluso, tuvieron que recibir asistencia con agua porque la nube de gas llegó a afectarlos.
Parte de los que estaban en el bar también se vieron afectados por el gas arrojado por el agresor. De acuerdo con lo que contaron, la situación terminó en ese momento y, entonces, se dio por finalizada la jornada de carnaval por miedo a que los agresores volvieran, agregaron en el comunicado.
“Claramente, lo ocurrido ayer fue un acto homofóbico. Claramente, lo sucedido ayer nace de un odio al colectivo LGBT. Claramente, lo sucedido ayer tiene una raíz de odio y violencia para las personas, individuos que ya no nos callamos”, advirtieron los líderes del espacio, quienes adelantaron que este miércoles elevarían una denuncia ante el INADI.
“No pueden quedar impunes y, mucho menos, estar así como así en las calles… Sobre todo cuando uno amenazó con sacar su arma”, indicaron.
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