En Wimbledon se dio un partido histórico de dobles entre dos equipos que fueron campeones en esta modalidad por mucho tiempo.
Los colombianos Juan Sebastián Cabal y Robert Farah jugaron contra el español Marcel Granollers y el argentino Horacio Zeballos. La dupla del sudamericano ganó y avanzó a la siguiente ronda, pero lo más emocionante de este encuentro fue el noble gesto que tuvo Zeballos con el hijo de sus rivales.
El gesto
Cuando estaban guardando sus cosas para irse del Court 4 del All England Club, vio que los colombianos seguían sentados en sus bancos. Farah estaba desanimado por el resultado y Cabal tenía a su hijo en sus brazos, que parecía estar triste por la derrota de su padre en el Grand Slam.
El español Granollers saludó al público antes de irse al vestuario y Zeballos se acercó al niño para hablarle, mientras recibía la aprobación con una sonrisa y un gesto de su colega.
Antes de empezar el torneo, uno de los mejores doblistas de los últimos años había expresado su alegría por vivir este mágico certamen con su familia: “¡Este torneo siempre tendrá un sabor único, una energía especial! ¡Y qué mejor que compartirlo con tus hijos, que bendición poder tenerlos a mi lado!”, había escrito Cabal en un posteo de su Instagram que tenía varias fotos con los niños.
Justamente desde esa cuenta el colombiano había hecho una profunda reflexión sobre la educación de sus hijos también en las últimas horas: “Siempre me preguntan si quiero que Jacobo sea tenista, no puedo negar que me da gusto verlo jugar tenis y saber que mi carrera lo influyó, pero más que si profesionalmente quiere ser tenista o no, sueño y deseo que él pueda elegir ser lo que lo haga feliz, que todo lo que haga lo haga con la satisfacción y el esfuerzo de dar lo mejor de él. Mientras la vida y Dios me lo permita, siempre estaré aquí para apoyarlo, darle lo mejor de mí, para abrazarlo, bendecirlo y tomar su mano cuando más me necesite. ¡Te amo hijo y que siempre seas feliz!”.
