La víctima tenía gran cantidad de material inflamable en lugar.
En la madrugada de este lunes un equipo de la Dirección General de Bomberos de la Policía, sofocó el fuego en un taller mecánico que funcionaba en el fondo de una vivienda ubicada en calle Junín al 2300. Tras el pedido de ayuda de los vecinos el personal llegó rápidamente y evitó que las llamas llegaran al interior de la casa.
Cuando el equipo llegó en la autobomba ya se encontraba el personal policial del Sistema de Emergencias 911 delimitando el lugar para que ellos puedan trabajar, porque había una gran acumulación de cosas en pleno proceso combustivo emanando demasiado humo, llamas y gases calientes. Por eso desplegaron un intenso trabajo con tres líneas de ataques (mangueras) y el apoyo de un camión hidrante para poder sofocar el fuego y evitar que las llamas lleguen a la casa familiar.
El personal policial trabajó y controló que no quedé ningún foco ígneo. Para finalizar constaron que solo había pérdidas materiales.