Manuel Canto, quien se desempeña como director de Comercio Interior de la provincia, hizo hincapié recientemente en una normativa clave que prohíbe expresamente el cobro adicional —también conocido como «plus»— al momento de abonar boletas de servicios o realizar recargas de tarjetas utilizadas para el transporte público. Según explicó, esta irregularidad motivó la clausura de un local de cobro de servicios situado en pleno microcentro.
En efecto, durante los últimos meses, la Dirección de Comercio Interior ha recibido un número creciente de denuncias por parte de consumidores que reportaron haber sido obligados a pagar montos superiores a los establecidos al intentar cancelar sus facturas o cargar sus tarjetas de transporte en sucursales de empresas como Rapipago o Pago Fácil. Estas prácticas indebidas también fueron detectadas cuando se intentaban realizar cargas a tarjetas como la Sube, Metropolitana o Independencia.
Canto mencionó que la ley provincial 9.244 establece con claridad que está terminantemente prohibido aplicar recargos en los centros de cobro extrabancarios cuando se trata de servicios públicos, que comprenden rubros como la electricidad, el agua, los servicios de telefonía y los tributos de índole nacional.
Fue en este contexto que las autoridades procedieron a clausurar una sucursal de Rapipago ubicada en la calle 25 de Mayo al 319, tras detectar que en el local había un cartel que informaba a los clientes que debían pagar un 20% adicional sobre el importe original. «Lo encontramos en plena infracción, con un cartel que exigía abonar un porcentaje del 20%», relató el funcionario.
Canto aseguró además que desde el organismo continuarán realizando controles y no dudarán en aplicar sanciones similares en otros puntos de la provincia si se constatan hechos semejantes. “No vamos a permitir este tipo de abusos en ningún rincón del territorio provincial”, concluyó de manera enfática.