El miércoles 27 de agosto tuvo lugar una audiencia de juicio abreviado en la que Ramón Gerardo Valdez, de 51 años, fue sentenciado a prisión perpetua por el asesinato de su pareja, Marta del Valle Santillán, de 50 años. El crimen ocurrió el domingo 25 de mayo en una vivienda ubicada en la calle Larrea al 1700, en el barrio Victoria de San Miguel de Tucumán, y la investigación estuvo a cargo de la Unidad de Homicidios I del Ministerio Fiscal.
Durante la audiencia se presentaron los informes de autopsia que determinaron que la muerte de Santillán fue causada por una sepsis derivada de una herida de arma de fuego. Las pericias balísticas confirmaron que el arma utilizada fue un rifle Remington calibre 11,25 mm. Además, se incorporaron las declaraciones de los tres hijos menores de la pareja, de 11, 15 y 16 años, tomadas mediante Cámara Gesell. La auxiliar de fiscal, María José Agüero, destacó la existencia de agravantes y calificó la conducta de Valdez como dolosa, con intención deliberada de provocar la muerte.
El juez aceptó el acuerdo de juicio abreviado y ordenó el traslado de Valdez desde su lugar de detención al Servicio Penitenciario de Villa Urquiza. La sentencia incluye la posibilidad de revisión a los 20 años de cumplimiento. El ataque se produjo alrededor de las 12:30 del 25 de mayo, cuando Valdez estaba en el domicilio junto a Santillán y sus hijos; el disparo impactó en el costado izquierdo del pecho, con salida por la zona lumbar baja.
Marta Santillán fue internada tras el ataque y falleció el 8 de junio en el hospital Padilla. Según la acusación, el homicidio se enmarca en una relación caracterizada por asimetría de poder y sometimiento. El proceso judicial continuó con el cumplimiento de la sentencia, incluyendo el traslado del condenado y la aplicación de las medidas correspondientes según lo establecido por la justicia.