La localidad de San Isidro de Lules, en Tucumán, se encuentra nuevamente conmocionada tras el hallazgo del cuerpo sin vida de un hombre este lunes, alrededor de las 14 horas. El descubrimiento se produjo a pocos metros del lugar donde, el día anterior, fue encontrado el cuerpo de Kiara Jazmín Caro, una niña de 7 años. El hombre, identificado como S.G., de 61 años y residente en la Avenida Alem, no presentaba indicios de ser una persona en situación de calle, ya que su vestimenta no correspondía a la de alguien sin hogar.
El Ministerio Público Fiscal (MPF) emitió un comunicado en el que detalló que el cuerpo fue encontrado encallado en el río, aproximadamente a 300 metros del puente. Según las primeras averiguaciones, el fallecido era un hombre de 60 años que residía en la zona sur de la capital tucumana. Entre sus pertenencias se encontraba su documento de identidad, lo que facilitó su identificación. El fiscal Carlos Sale, titular de la Unidad Fiscal Especializada en Homicidios II, señaló que es necesario esperar los resultados de la autopsia, que se realizará en las próximas horas, para determinar las causas del fallecimiento. Además, el fiscal supervisó personalmente las medidas investigativas llevadas a cabo en el lugar. Los restos fueron trasladados a la Morgue Judicial, donde se realizarán las pericias científicas correspondientes.
Este macabro descubrimiento ocurre menos de 24 horas después de que se encontrara el cuerpo de Kiara Caro en la misma zona ribereña. La niña de 7 años había sido reportada como desaparecida por su madre durante la madrugada del domingo. Según la denuncia, Kiara se habría perdido de vista mientras caminaban cerca del río. Tras un operativo de búsqueda, su cuerpo fue localizado, lo que llevó a la detención de la madre y su pareja, quienes permanecen bajo investigación por su presunta responsabilidad en la muerte de la menor.
La cercanía entre ambos hallazgos ha generado preocupación y conmoción en la comunidad de Lules. Aunque las autoridades no han establecido una conexión oficial entre los dos casos, la coincidencia en el lugar y el breve lapso de tiempo entre los descubrimientos han mantenido en vilo a los habitantes de la localidad. Mientras tanto, la investigación continúa para esclarecer las circunstancias de la muerte del hombre y determinar si existe alguna relación con el caso de Kiara Caro.
La situación ha dejado a la comunidad en un estado de alerta, exigiendo respuestas y justicia ante estos trágicos sucesos. Las autoridades trabajan intensamente para brindar claridad sobre lo ocurrido y garantizar que se tomen las medidas necesarias para evitar que hechos similares se repitan en el futuro.