Pablo Guillermo Mamaní, único detenido por el asesinato de Julia Elena Espinoza (42), su expareja y madre de sus hijos, declaró ante la Justicia: «Yo no he sido». Sin embargo, las autoridades sostienen que existe evidencia contundente de su responsabilidad en el crimen ocurrido el 4 de mayo en Los Nogales.
Los hechos
Según la investigación, Mamaní habría sorprendido a Espinoza conversando con otra persona en la entrada de la escuela Miguel de Azcuénaga. Tras el retiro del acompañante, el acusado —con antecedentes de violencia física y psicológica contra la víctima— la habría golpeado y estrangulado con sus manos y finalmente usó el cordón de su pantalón para ahorcarla en una reja del lugar.
Audiencia y medidas judiciales
En la audiencia del 6 de mayo, la fiscalía solicitó:
- Validar la aprehensión de Mamaní.
- Aplicar la máxima coerción por seis meses.
La defensa del imputado rechazó los cargos y pidió su libertad, aunque aceptando que continuara el proceso. Mamaní, visiblemente afectado, insistió en su inocencia: «Estoy muy quebrado. Creo en la Justicia».
Finalmente, la jueza resolvió:
✔ Aprobar parcialmente lo pedido por la fiscalía.
✔ Ordenar prisión preventiva por cinco meses.
Contexto de violencia
El caso expone un nuevo femicidio en un contexto de agresiones previas. Mamaní habría actuado con premeditación, abandonando el cuerpo de Espinoza en el lugar y regresando a la vivienda que compartían.
La fiscalía continúa recopilando pruebas, mientras familiares y organizaciones exigen justicia para Julia Elena, otra víctima de la violencia machista en Argentina.
