La investigación por el violento asalto que tuvo como víctima a un abogado, a quien le sustrajeron una considerable suma de dinero durante lo que aparentaba ser una operación de compra de dólares, ha incorporado dos nuevos imputados al expediente. Los involucrados, que resultaron ser hermanos, enfrentan la acusación de haber participado activamente en el hecho, el cual ocurrió el 22 de diciembre de 2024 en la zona de avenida Gobernador del Campo al 500. Según las autoridades, los imputados habrían agredido físicamente y amenazado con armas de fuego al damnificado.
Ambos sospechosos se presentaron voluntariamente ante la justicia, luego de no haber sido localizados durante los procedimientos de allanamiento que la fiscalía llevó a cabo días atrás en busca de su paradero. Por su parte, otro hombre que había sido detenido previamente continúa bajo prisión preventiva, al haber sido señalado como quien coordinó la cita con el abogado para efectuar la supuesta transacción de compra de divisas.
El sábado 11 de enero, la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos de feria, encabezada por el fiscal Gerardo Salas, llevó a cabo una audiencia en la que se formularon cargos contra los dos nuevos implicados. La acusación los señala como presuntos coautores del delito de robo agravado, calificándolo como cometido en poblado y en banda, además de agravado por el uso de armas de fuego.
Durante la presentación de la teoría del caso, la auxiliar de fiscal Andrea Carlino ofreció un detallado relato de los hechos. Según lo expuesto, el abogado, el 22 de diciembre, aproximadamente a las 15:30, llegó al lugar pactado tras haber concretado vía WhatsApp un acuerdo para la compra de dólares con uno de los ahora imputados. Al llegar, ambos se dirigieron hacia la entrada de un conjunto de monoblocks, lugar donde se llevaría a cabo el conteo del dinero. Fue en ese preciso instante cuando aparecieron los otros dos sospechosos, quienes se acercaron por detrás del abogado, lo golpearon y, tras amenazarlo con armas de fuego, le arrebataron una suma cercana a los $2.000.000 en efectivo y un teléfono celular, tras lo cual huyeron rápidamente del lugar.
La representante del Ministerio Público Fiscal (MPF) solicitó durante la audiencia la prisión preventiva de los dos hermanos por un período de 27 días. Argumentó que existen riesgos claros de fuga y de obstaculización del proceso judicial, lo que justifica la necesidad de esta medida restrictiva. “Nos encontramos ante un delito grave, no solo por la utilización de armas de fuego, sino también por la evidente superioridad numérica de los agresores frente a la víctima. Además, es evidente que el hecho fue premeditado y cuidadosamente planificado para lograr su objetivo delictivo”, explicó Carlino. También subrayó que uno de los presuntos participantes ya se encuentra detenido y que resulta imperativo que los nuevos involucrados reciban el mismo tratamiento, ya que, de permanecer en libertad, podrían interferir con el desarrollo de la investigación.
Otro elemento relevante mencionado por la fiscalía es que el abogado logró ver a los asaltantes, ya que estos no intentaron ocultar sus rostros. Asimismo, se presentó el testimonio de algunos vecinos que habrían presenciado parte del incidente y que identificaron a los sospechosos, aunque también manifestaron temor hacia ellos. “Debemos proteger estos testimonios, ya que se trata de personas que residen en la misma zona que los acusados y que han expresado sentir miedo ante posibles represalias”, concluyó la auxiliar fiscal.
Tras escuchar los argumentos presentados por la fiscalía, la jueza a cargo del caso resolvió otorgar la medida cautelar solicitada, imponiendo la prisión preventiva a los dos imputados por el período de 27 días, hasta el próximo 6 de febrero, con el fin de garantizar el avance de la causa sin interferencias.