“Drogas, asfixia y marcas violentas”, los escabrosos detalles de la autopsia de Lucía Pérez

Los condenados en 2018 por “venta de drogas”, Matías Farías y Juan Pablo Offidani, afrontan un nuevo juicio por el femicidio de Lucía Pérez, la joven de 16 años asesinada el 8 de octubre de 2016.

En la audiencia técnica de este jueves, los peritos integrantes de la Junta Médica de la Suprema Corte de Justicia pormenorizaron en los Tribunales de Mar del Plata su trabajo, sin la presencia de medios de comunicación en la sala.

Los peritos no descartaron un abuso sexual por parte de los imputados a Pérez, a la vez que ratificaron que el deceso de la menor de edad fue la asfixia provocada el consumo de cocaína.

Silvina Cabrera, Mónica Tinto y Sebastián de los Reyes no lograron determinar la cantidad exacta de la sustancia dentro del cuerpo. Según detallaron los especialistas, la asfixia le generó un edema pulmonar seguida de una falla cardíaca.

Los profesionales dejaron en claro durante la reunión judicial que el cuerpo de la joven de 16 años tiene marcas “compatibles a una relación sexual brusca o violenta”. A su vez, remarcaron que no existió una sobredosis por parte de Pérez, aunque sí hubo un consumo de cocaína.

Por otra parte, Tinto y Cabrera no dejan de lado el abuso sexual y consideraron importante detallar que Matías Farías, el hombre más complicado en el caso, tuvo contacto con Pérez entre 15 y 30 minutos, antes de la muerte que conmocionó a un país.

Lucía Pérez tenía 16 años al momento de su muerte.

En diálogo con la agencia Télam, la mamá de la joven, Marta Montero, expuso su pedido de justicia: “Hace 2308 días que Lucía no tiene justicia. Quién mató a Lucia: eso venimos a preguntar. Esperamos una mirada que no tuvo: ni de género ni humanitaria”.

Moreno insistió en que el fallo sea condenatorio “como corresponde” y consideró que ello permitiría que su hija “pueda descansar en paz”. “Es lo menos que se tiene que lograr”, remarcó.