Gonzalo Nicolás González, de 27 años, está acusado de homicidio culposo del taxista Carlos Gerardo Robles, de 28 años. Según el auxiliar fiscal Benjamín Zavalía, un testigo declaró que González ya había tenido otro accidente en 2016 por conducir a alta velocidad y bajo los efectos del alcohol en la ruta 9. El testigo afirmó que los padres de González siempre lo protegieron. En la audiencia de ayer se decidió prorrogar la prisión preventiva del acusado por 30 días más.
Sobre este nuevo dato, los defensores Leonardo Bauque y Macario Santamarina remarcaron que no existía un antecedente sobre ese otro incidente, además presentaron un certificado médico sobre González, solicitando el beneficio de morigerar la cautelar en un arresto domiciliario por problemas cardíacos y obesidad. Ese planteo, que no prosperó, podría ser revisado por médicos forenses para evaluar el diagnóstico.
El día de la tragedia
La acusación afirma que el 24 de abril a las 6:20, el taxista Carlos Gerardo Robles conducía su taxi Fiat Cronos por la calle San Miguel cuando fue chocado por la camioneta VW Amarok de Gonzalo Nicolás González en el cruce con Marcos Paz. González conducía a aproximadamente 150 km/h y bajo los efectos del alcohol. Robles falleció en el acto.
“Pudo haber matado a cualquiera, incluso a más personas. Mi marido estaba trabajando y acababa de dejar a una pasajera y a su hija cuando lo atropelló”, señaló la viuda, Johanna Paz, quien es asistida por los abogados Patricio Fresia y José María Molina. La mujer, tras escuchar la audiencia, reflexionó: “este ‘vaguito’ lo volverá a hacer (manejar alcoholizado) hoy, mañana o cuando salga, porque ni él ni sus ‘papitos’ tienen conciencia ni arrepentimiento de lo que él causó. Además, ¿por qué andaba tomando así si tiene tantas enfermedades? No quiero que quede libre”.
Medida cautelar
Zavalía, quien junto a Fernando Isa representaron a la Fiscalía en esta audiencia, solicitó prorrogar la preventiva de González por 58 días para evitar un posible entorpecimiento mediante la influencia en los testigos.
“González intentó torcer la voluntad de algunos testigos al proponerles que dijeran que quien conducía esa noche era otro. Eso lo dicen las personas que iban con él en la camioneta”, fundamentó el auxiliar fiscal. El defensor Bauque no cuestionó esos dichos: “puede ser verdad, tras un accidente así uno puede perder el sentido; pero más allá de eso González siempre se sometió al proceso”. Tras evaluar las posturas, la jueza Valeria Mibelli dio lugar al pedido de la Fiscalía y de la querella y extendió la prisión preventiva, por 30 días./Fuente: La Gaceta
