El trágico hecho que terminó con la vida de Tatiana Yanina Medina, una joven de 33 años que circulaba en motocicleta junto a su pareja cuando fue embestida en la localidad de Villa Carmela, avanza hacia la instancia de juicio oral y público. Esta evolución del proceso judicial fue confirmada por la Unidad Fiscal de Homicidios I, dirigida por el fiscal Pedro Gallo, durante una reciente audiencia en la que se redefinieron los cargos que enfrenta el imputado y se debatió la necesidad de prolongar la medida de prisión domiciliaria que pesa sobre él.
El incidente ocurrió en la madrugada del 10 de febrero de este año. De acuerdo con la reconstrucción fiscal de los hechos, Brian Nicolás Oliver, de 27 años, manejaba una camioneta Toyota Hilux cuando atropelló la moto en la que viajaban Medina y su pareja, Luciano Alberto Arroyo, de 30 años. La colisión tuvo lugar en la Ruta 315, a la altura de la zona conocida como La Arboleda. En el momento del siniestro, el conductor tenía una concentración de alcohol en sangre de 1.10 gramos por litro, cifra que excede ampliamente los niveles permitidos por la ley.
Como resultado del impacto, Tatiana Medina falleció de forma inmediata debido a la violencia del choque, mientras que su compañero sobrevivió pero sufrió múltiples lesiones graves, incluyendo traumatismo craneal y daños importantes en varias partes del cuerpo, como la rodilla, el hombro y el tobillo del lado izquierdo. A pesar de la magnitud del accidente, Oliver abandonó el lugar sin brindar ningún tipo de ayuda a las víctimas. Su detención se concretó más de nueve horas después, en la localidad de Lomas de Tafí.
Durante la audiencia judicial, el auxiliar fiscal Lucas Maggio explicó que la modificación en la imputación no se debió a un cambio en la interpretación jurídica del hecho, sino a un ajuste técnico en el horario preciso del accidente. Este nuevo dato surgió tras el análisis actualizado de imágenes obtenidas de cámaras de seguridad cercanas al lugar del suceso. Además, se presentó un pedido formal para extender por 60 días la prisión domiciliaria del imputado, medida que ya venía cumpliendo.
Según informó el Ministerio Público Fiscal, el expediente se encuentra en una etapa avanzada y está listo para ser elevado a juicio oral y público, donde se buscará establecer con claridad las responsabilidades penales del acusado.
Brian Oliver, quien se desempeña como radiólogo, fue imputado por los delitos de homicidio culposo y lesiones culposas, ambos agravados por dos factores: el elevado nivel de alcohol que tenía al momento del choque y la posterior fuga sin socorrer a los heridos. La defensa, por su parte, intentó que se le concediera la libertad bajo ciertas condiciones de conducta, pero el juez desestimó ese planteo y dio lugar a todas las solicitudes de la fiscalía.
Con esta resolución judicial, la causa que investiga la muerte de Tatiana Medina se encamina hacia su etapa más crucial: el juicio. Allí se buscará no solo esclarecer los detalles del hecho, sino también garantizar justicia ante un episodio que provocó una profunda conmoción en la comunidad local.