Sandro, padre del adolescente que estuvo internado tras recibir una golpiza en la Escuela Técnica Nº 2, se presentó en la comisaría con la intención de denunciar el ataque a su hijo, pero se encontró con una sorpresa inesperada: la denuncia había sido iniciada por las propias autoridades de la escuela, apuntándolo a él por supuestas amenazas y agresiones contra el personal educativo.
El menor, de 13 años, permaneció internado durante 24 horas en el Hospital de Niños después de recibir un fuerte golpe en la cabeza propinado por un compañero, que le provocó un traumatismo craneal, según el parte médico. Sandro señaló que el ataque no se trató de un hecho aislado, ya que su hijo había sido víctima de agresiones anteriores dentro del establecimiento.
Tras recibir el alta médica, el padre acudió a la comisaría seccional 2.ª para formalizar la denuncia por la golpiza. Sin embargo, allí le informaron que él era el denunciado por amenazas, en un episodio que Sandro asegura está documentado en grabaciones y filmaciones con presencia de personal policial. “Fui a radicar la denuncia correspondiente en la comisaría y me dicen que yo soy el denunciado. Me denunciaron por amenazas. Todo está grabado y filmado; hubo personal policial en ese momento y yo no agredo a nadie. Había cuatro policías, yo me retiré en mi auto llevando a mi hijo al hospital y no hice nada más”, declaró a Los Primeros.
Además, otra madre que se acercó a la comisaría señaló que el acoso entre estudiantes es un fenómeno habitual en la escuela, describiendo agresiones recurrentes entre alumnos. Su hijo también había sufrido ataques similares, lo que evidencia un patrón de violencia entre pares dentro del establecimiento.