Una mujer de 50 años permanece internada en estado crítico tras haber recibido un disparo en el pecho por parte de su pareja. El violento episodio tuvo lugar este domingo al mediodía dentro de una casa ubicada en la calle Larrea al 1700, en el barrio Victoria de San Miguel de Tucumán. Durante el ataque, los tres hijos menores de la pareja presenciaron la escena, quedando en una situación de gran vulnerabilidad emocional y familiar.

La víctima fue identificada como Marta del Valle Santillán, mientras que su agresor, Ramón Gerardo Valdez, de 51 años, es señalado como el responsable del disparo, efectuado a corta distancia con un pistolón calibre 1125. Según detalló la Unidad Fiscal de Homicidios I, el incidente ocurrió cerca de las 12:30 horas. La grave situación se conoció cuando uno de los hijos alertó a un hermano de la mujer, informándole lo que sucedía dentro del hogar.
Cabe destacar que, antes del ataque, uno de los menores había expresado a su maestra que su madre sufría violencia física por parte de Valdez. Esto llevó a la intervención policial, pero al llegar los efectivos al lugar, el agresor disparó contra Marta, quien a pesar de la herida logró salir hasta la vereda antes de caer gravemente herida.
Rápidamente, la mujer fue trasladada al Hospital Padilla, ingresando alrededor de las 13:10 horas con una herida de bala que atravesó su pecho, con entrada en el tórax y salida en la zona lumbar. Su estado de salud es crítico y el pronóstico reservado.
Después de disparar, Valdez intentó escapar por el patio trasero, pero fue detenido rápidamente por la policía, que también confiscó el arma utilizada en el ataque. El fiscal a cargo de la causa, Pedro Gallo, ordenó su detención inmediata y su traslado a la Comisaría Seccional 13. Además, el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF), junto a los investigadores Ramón Soria y Sara Fernández, está trabajando en la escena para recolectar pruebas y testimonios que permitan avanzar en la investigación.
El Ministerio Público Fiscal analiza la posibilidad de calificar el ataque como un intento de femicidio, un hecho que ha generado gran preocupación en la comunidad, sobre todo por la exposición directa que tuvieron los menores durante el episodio violento.