La sede central del PAMI, el organismo que brinda cobertura médica a los jubilados, comunicó este jueves que iniciará una auditoría interna con el objetivo de revisar las compras y contrataciones que se llevan a cabo en sus distintas oficinas a lo largo del país. A través de un comunicado, la institución remarcó que planea adoptar medidas que apunten a transparentar el funcionamiento de las delegaciones provinciales, que, según lo expresado, deben dejar de ser “una caja negra al servicio de la política”. Además, se puntualizó que hubo una utilización inusualmente alta de “contrataciones directas, sin licitación” para la adquisición de medicamentos, tratamientos e insumos médicos, lo que llamó la atención de las nuevas autoridades.

Santiago Caputo se afilió al partido en la ciudad en una reunió junto a Javier y Karina Milei, Lule Menem y Pilar Ramírez.
En un mensaje que no escatimó críticas, la conducción del PAMI fue tajante al afirmar: “No se va a tolerar que el dinero de los jubilados termine en manos de vivos que durante años hicieron negocios al margen de la ley”. Aunque esta medida tiene implicancias administrativas relevantes, en realidad su trasfondo debe leerse desde una óptica política: es el reflejo de una disputa interna cada vez más evidente dentro del oficialismo, especialmente entre los sectores que responden a Santiago Caputo, asesor presidencial y referente del ala estratégica, y aquellos vinculados a los armadores territoriales como “Lule” Menem, Martín Menem y Sebastián Pareja, quien encabeza La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires.
La diferencia entre estos grupos radica en sus prioridades políticas. Mientras que los armadores impulsan la construcción de un partido puramente libertario en todos los rincones del país, con presencia incluso en los concejos deliberantes más pequeños, desde el ala estratégica, alineada con la Casa Rosada, se piensa en términos de eficiencia electoral: prefieren concentrar recursos y esfuerzos en las elecciones legislativas nacionales y están dispuestos a resignar batallas locales si eso permite ganar más bancas en el Congreso en octubre. Esta división se ha trasladado a distintas áreas del gobierno, y el PAMI se ha convertido ahora en uno de los principales escenarios de esta confrontación.
En este contexto, vale señalar que el organismo actualmente se encuentra bajo la órbita del Ministerio de Salud, a cargo de Mario Lugones, un funcionario con un profundo conocimiento del nexo entre política y salud pública. Su llegada al Gobierno fue impulsada por Santiago Caputo: primero como asesor especializado en temas sanitarios y más adelante como ministro en funciones. Además, Mario Lugones es padre de Rodrigo Lugones, un consultor político que fue discípulo del ecuatoriano Jaime Durán Barba y quien tuvo un rol importante en la formación de Caputo. Fue precisamente Mario Lugones quien propuso a Esteban Leguizamo como director ejecutivo del PAMI, y también avaló a su número dos, Carlos Zamparolo. Ambos quedarán a cargo del proceso de investigación que se anunció oficialmente este jueves.
Durante años, tanto el PAMI como otros organismos con fuerte presencia federal, como la ANSES, han funcionado en dos niveles: una sede central, encargada de las decisiones administrativas generales, y una red de delegaciones provinciales que, además de prestar atención al público, tienen un acceso directo a los ciudadanos. Estas estructuras han sido tradicionalmente utilizadas por los distintos gobiernos para operar políticamente en el territorio, ya que permiten realizar contrataciones de personal en cada localidad, establecer contacto directo con los votantes e, incluso, generar recursos a través de los nombramientos y adjudicaciones.
En el actual oficialismo, muchas de estas oficinas fueron distribuidas entre dirigentes afines a los Menem y a Sebastián Pareja, como parte del proceso de armado partidario que se consolidó en 2024 para darle al presidente Javier Milei y a su hermana Karina una estructura territorial propia. Por eso, la decisión del PAMI de auditar el manejo financiero de sus sedes provinciales debe interpretarse también como una movida en la interna libertaria.
La creciente tensión ha generado varios episodios que terminaron escalando hasta llegar a oídos del presidente y de su hermana. En las últimas semanas, empleados del PAMI y de la ANSES en provincias como Misiones, Santa Cruz y La Pampa denunciaron que se les exigían aportes económicos al partido como condición para conservar sus puestos. Un ejemplo particularmente ilustrativo ocurrió en Oberá, Misiones, donde 22 funcionarios firmaron una carta en la que acusaban al referente local de La Libertad Avanza, Adrián Núñez, de retener el 10% de los salarios del personal público que trabajaba en la oficina del PAMI.
La situación se agravó ayer con un nuevo conflicto, esta vez visibilizado en las redes sociales. Marina Biagetti, influencer identificada con el movimiento libertario, denunció que fue expulsada del espacio político por Alberto Pascual, coordinador de LLA en Junín y titular de la delegación local del PAMI. El motivo: formar parte de la agrupación “Las fuerzas del cielo”, liderada por el activista libertario Daniel Parisini, conocido en redes como Gordo Dan. Biagetti escribió en su cuenta de X: “El coordinador de La Libertad Avanza en Junín, Alberto Pascual, que responde a Sebastián Pareja, me acaba de echar del partido por decir que soy de Las Fuerzas del Cielo. ¿Está el presidente Javier Milei al tanto?“.
Además de ocupar el cargo en la oficina de PAMI de Junín, Pascual también era responsable de coordinar la cuarta sección electoral de la provincia bajo el ala de Pareja. La denuncia de Biagetti tuvo repercusión inmediata. Parisini, desde su cuenta, respondió: “Voy a tomar cartas en el asunto”. Horas más tarde, Pascual fue desvinculado de su cargo en el PAMI.

Sebastián Pareja, titular de La Libertad Avanza (LLA) en la provincia de Buenos Aires.
Todo indica que Biagetti no habría dado a conocer este conflicto sin previamente haberlo conversado con sectores cercanos al poder. Prueba de ello es que incluso la cuenta de X que se presume pertenece a Santiago Caputo, @MileiEmperador, se hizo eco del tema. Retuiteó un mensaje del militante libertario Flavio Arenales –célebre por asistir a todos los actos de Milei con su cartel de cartón que dice “Fuerza del Cielo – Virrey del Pino”–, dirigido a Biagetti, donde le expresó: “Un soldado de las fuerzas del cielo nunca se rinde”./Fuente:LaNacion