Este jueves, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner volvió a tener presencia pública, aunque de forma no presencial, durante un encuentro de militantes realizado en el partido bonaerense de Quilmes. La actual intendenta, Mayra Mendoza, fue quien facilitó el contacto telefónico y activó el altavoz para que los presentes pudieran escuchar en vivo el mensaje de la exmandataria.
Al comenzar la comunicación, el público presente respondió de inmediato con vítores, aplausos y muestras de entusiasmo. Cristina, desde su domicilio en la Ciudad de Buenos Aires, expresó: “Mayra recién me contó que están reunidos en un plenario, como bien hacen los militantes. Eso es lo que hay que hacer: organizarse para salir a recorrer las calles en defensa del peronismo”, señaló con tono enérgico.
Continuando con su intervención, Kirchner hizo un llamado a redoblar esfuerzos de cara al contexto político y económico actual: “Hay que ponerle mucha fuerza, convicción y energía, porque es indispensable que esta gente que está generando hambre en nuestro pueblo reciba una respuesta contundente en las urnas”. En esa línea, finalizó con un mensaje motivador: “Un abrazo enorme a todos. A militar como sabemos hacerlo: con inteligencia, con el corazón, con afecto y, sobre todo, con mucho coraje”.
Por otra parte, este mismo jueves se conoció una decisión clave de la Justicia Electoral de Santa Cruz, que habilitó a la exjefa de Estado a ejercer su derecho al voto en los comicios provinciales del próximo 26 de octubre. En estas elecciones se renovarán cargos legislativos en el distrito patagónico.
El fallo judicial desestimó una resolución previa emitida por el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 2 de la Ciudad de Buenos Aires, el cual, en el marco de la Causa Vialidad, había dictaminado que Cristina Kirchner no podía votar hasta que se cumpla su condena, prevista para el 16 de junio de 2031. Sin embargo, la Justicia santacruceña argumentó que dicha inhabilitación no corresponde ser aplicada por su jurisdicción, subrayando que solo compete al juzgado provincial decidir sobre el derecho al sufragio de sus ciudadanos.
De esta manera, la expresidenta podrá participar activamente como electora en las próximas elecciones de su provincia, a pesar de la pena impuesta en una causa judicial aún bajo revisión en instancias superiores.