Durante su visita a Estados Unidos, donde tiene programado un discurso en las Naciones Unidas (ONU) y una reunión con Elon Musk, el presidente Javier Milei arremetió contra los “degenerados fiscales” y declaró que “la política social más efectiva es el equilibrio fiscal”. Esta afirmación se produjo después de una fuerte crítica del papa Francisco, quien desde el Vaticano y junto a Juan Grabois, señaló que “en vez de pagar justicia social, pagó el gas pimienta”.
RELACIÓN EMBI vs. PIB
— Javier Milei (@JMilei) September 21, 2024
Dado el impacto del accionar de los degenerados fiscales sobre el riesgo país, pedí a @fedesturze que midiera la relación entre el EMBI y el PIB.
A la luz de los resultados, si el riesgo país volviera a los niveles que tenían los K, estaríamos perdiendo un… pic.twitter.com/kWCeDIKnuT
El Presidente publicó un mensaje desde el avión titulado “Relación EMBI vs. PIB”. El índice de bonos de mercados emergentes (EMBI), cuyo nombre proviene de sus siglas en inglés, es utilizado por los mercados financieros para evaluar el riesgo de un país. Milei comparó este índice con el Producto Bruto Interno (PBI).
“Dado el impacto del accionar de los degenerados fiscales sobre el riesgo país, pedí a Federico Sturzenegger que midiera la relación entre el EMBI y el PIB”, comenzó el libertario este sábado en su cuenta de X.
Y explicó: “A la luz de los resultados, si el riesgo país volviera a los niveles que tenían los K, estaríamos perdiendo un tercio del PIB, pasando de USD 600MM a USD 400MM. En definitiva, el chiste de los degenerados fiscales cuesta USD 200MM. Al mismo tiempo si el PIB se lo toma en pesos, el impacto sería de 1/3 del que se observa en dólares”.
El mandatario señaló que cuando las políticas fiscales corruptas avanzan, el PIB en dólares disminuye en un 1/3 debido a una reducción en la actividad económica y en un 2/3 debido a un aumento en el tipo de cambio real. Como resultado, se eliminan los pagos en dólares y aumenta la cantidad de personas pobres e indigentes. Los impuestos corruptos solo incrementan la cantidad de personas necesitadas a través de sus acciones.
Finalmente, concluyó: “La mejor política social es equilibrio fiscal con presión fiscal descendiente y una política monetaria que termine con la inflación”.
Tras la publicación, Milei recibió elogios de sus seguidores en las redes sociales, algunos de los cuales dedicaron el mensaje al papa Francisco, en respuesta a la dura crítica que lanzó el viernes desde el Vaticano.
Esto ocurrió durante un simposio para conmemorar los 10 años del primer encuentro de los Movimientos Populares en el Vaticano. Aunque Francisco había anunciado que enviaría un mensaje grabado, apareció en persona para recibir a Juan Grabois y otros líderes piqueteros junto a dirigentes de todo el mundo.
En ese contexto, Francisco declaró: “Me hicieron ver una represión, hace una semana o un poco menos quizá. Obreros, gente que pedía por sus derechos en la calle. Y la policía la rechazaba con una cosa que es lo más caro que hay, ese gas pimienta de primera calidad. Y no tenían derecho a reclamar lo suyo, porque eran revoltosos, comunistas, no, no. El Gobierno se puso firme y en vez de pagar la justicia social pagó el gas pimienta, le convenía”. Y añadió: “Ténganlo en cuenta a eso”.
Además, relató que un emprendedor le contó que el secretario de un ministro -sin especificar si fue del Gobierno actual o anteriores- le pidió una coima.
En la Casa Rosada, las críticas sorprendieron y cayeron muy mal, pero se dice que Milei ordenó no confrontar con el Papa. Pidió a su equipo “no responderle”, y dejó claro que se trataba de una “opinión” que “no afecta” la hoja de ruta del Gobierno en materia social y en el control de los piquetes.
Así lo expresó el vocero presidencial Manuel Adorni, quien intentó suavizar el tono en la conferencia de prensa de ayer: “Es la opinión del papa Francisco, que nosotros escuchamos y reflexionamos. No tenemos por qué compartir la visión que tiene sobre algunas cuestiones. El respeto es total. No hay mucho más para decir”.
Coincidentemente, la crítica aguda de Francisco llegó al final de la misma semana en la que recibió en el Vaticano a Sandra Pettovello, la ministra de Capital Humano encargada de la política social del gobierno de Milei.
