Detalles de la cena privada de Javier Milei en la Casa Rosada y el encuentro de militantes en el despacho de Santiago Caputo

Tras su enérgico discurso en el Congreso de la Nación, donde protagonizó un cruce con el diputado Facundo Manes y un breve momento de tensión con la vicepresidenta Victoria Villarruel, el presidente Javier Milei organizó una cena en la Casa Rosada con sus ministros y funcionarios de mayor rango. El objetivo del encuentro fue trazar la hoja de ruta para el año, marcado por las elecciones legislativas. Uno de los primeros en llegar fue el ministro de Relaciones Exteriores, Gerardo Werthein, quien esperó a Milei en la entrada de la calle Rivadavia.

El presidente arribó pasadas las 22:40, acompañado de su hermana y secretaria general, Karina Milei. Juntos se dirigieron al Salón Eva Perón, donde ya estaba todo preparado para recibir a los invitados. Poco después, una combi blanca transportó al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y a los titulares de las carteras de Economía, Luis “Toto” Caputo; Defensa, Luis Petri; Seguridad, Patricia Bullrich; Salud, Mario Lugones; Capital Humano, Sandra Pettovello; y Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger. El último en llegar fue el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, quien subió rápidamente las escaleras para unirse a sus colegas.

También participaron de la cena el vocero presidencial, Manuel Adorni; el influyente asesor Santiago Caputo, quien horas antes había tenido un fuerte altercado con Manes; y el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem. Sin embargo, Villarruel no fue invitada a la reunión, lo que evidenció las tensiones entre ella y Milei, especialmente después de que intentara dar por finalizada la Asamblea Legislativa antes de que el presidente terminara su discurso.

El menú de la cena incluyó una entrada de ensalada de rúcula con tomates cherry, seguida de un plato principal de carne al horno con milhojas de papa, acompañado de agua y gaseosa. El postre consistió en tiramisú y ensalada de frutas. Mientras tanto, en el Salón Martín Fierro, rebautizado extraoficialmente como “Benjamín Solari Parravicini”, se llevó a cabo una cena paralela. Allí, en el despacho de Santiago Caputo, se reunieron algunos de los funcionarios más jóvenes, encargados de las redes sociales oficiales y miembros de la agrupación militante “Las Fuerzas del Cielo”.

Entre los presentes en esta segunda cena estuvieron Agustín Romo, jefe del bloque de diputados en la Legislatura bonaerense; Juan Pablo Carreira, alias “Juan Doe”, director de Comunicación Digital; el influencer Daniel “El Gordo Dan” Parisini; Tomás Jurado, creador de la cuenta “El peluca Milei”; e Iñaki Gutiérrez, responsable de la cuenta de TikTok del presidente. A diferencia de los ministros, este grupo optó por un menú más modesto, pidiendo comida rápida a través de una aplicación de delivery.

En un momento de la noche, Caputo pasó a saludar a los jóvenes funcionarios, acompañado de su asistente, Macarena Alifraco; el secretario de Justicia, Sebastián Amerio; y la secretaria de Planeamiento Estratégico Normativo, María Ibarzábal Murphy. Caputo venía de un tenso enfrentamiento con Manes, a quien primero increpó desde el palco del Congreso y luego confrontó directamente en los pasillos. “Casi nos vamos a las piñas”, comentó entre risas uno de los asistentes a la cena, quien responsabilizó al diputado radical por el altercado: “Es un irrespetuoso, interrumpió al Presidente cuando estaba dando el discurso”, afirmó con molestia.

Antes del acto en el Congreso, los ministros también utilizaron la Casa Rosada como punto de encuentro. Sin embargo, Werthein, Lugones, “Toto” Caputo y Javier Herrera Bravo, secretario Legal y Técnico, prefirieron esperar en la oficina de Francos, en el antiguo Ministerio del Interior, para escapar del calor y disfrutar del aire acondicionado hasta que fue hora de partir.

En resumen, la noche en la Casa Rosada reflejó no solo la celebración del discurso presidencial, sino también las dinámicas internas del Gobierno, con dos cenas paralelas que simbolizaron las diferentes esferas de poder y las tensiones que persisten en el entorno de Milei.