Macri luego de la catastrófica derrota en CABA: «Si hay respeto estamos dispuestos a dialogar con La Libertad Avanza»

El exmandatario argentino Mauricio Macri brindó una profunda reflexión sobre los resultados obtenidos por su espacio político, el PRO, en las recientes elecciones legislativas celebradas en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En dicha contienda, el partido que fundó y condujo durante más de una década obtuvo un magro 15,92% de los votos, ubicándose en la tercera posición detrás de Es Ahora Buenos Aires, que alcanzó el 27,35%, y de La Libertad Avanza, la fuerza liderada por el actual presidente Javier Milei, que cosechó el 30,13% del apoyo electoral.

Durante una entrevista concedida al canal de noticias TN, Macri no sólo reconoció con honestidad el revés electoral, sino que también ofreció una autocrítica en torno a las decisiones estratégicas que tomó su partido durante la campaña. En particular, asumió que anticipar los comicios en la Ciudad no fue una jugada acertada. En palabras del exjefe de Estado, dicha maniobra estuvo motivada por la intención de fomentar un debate constructivo en torno a cómo preservar los logros alcanzados en la administración porteña y cómo proyectar una agenda de progreso. Sin embargo, según su análisis, el intento de instalar esa discusión local fue rápidamente absorbido por la dinámica nacional: Javier Milei capitalizó el escenario y lo transformó en un referéndum sobre el rumbo económico que ha emprendido su gestión a nivel nacional.

Macri, al analizar el desenlace de la elección, se mostró realista y reflexivo. Admitió que no es razonable esperar triunfos permanentes y que las fuerzas políticas deben prepararse tanto para las victorias como para las derrotas. «No se puede ganar siempre. Once elecciones seguidas son muchas», expresó, en alusión al largo ciclo en el que el PRO logró mantenerse al frente de la Ciudad de Buenos Aires desde 2007, cuando él mismo asumió la jefatura de gobierno porteña.

En esa línea, el expresidente se mostró dispuesto a revisar no sólo las estrategias políticas, sino también los vínculos con otras fuerzas. En un momento clave de la entrevista, dejó abierta la posibilidad de restablecer canales de comunicación con el presidente Javier Milei, con quien ha tenido momentos de tensión, pero también coincidencias ideológicas, especialmente en lo que respecta al enfoque económico. Aunque no explicitó los términos ni los plazos de ese eventual diálogo, su declaración sugiere una actitud más abierta frente al nuevo escenario político que se ha configurado tras las elecciones.

El reconocimiento de errores estratégicos, la aceptación de una derrota significativa y la voluntad de reconfigurar vínculos con el oficialismo libertario marcan una nueva etapa en la postura pública de Macri, quien se enfrenta a la necesidad de redefinir el rol del PRO dentro de la oposición, en un contexto en el que su partido ha comenzado a perder peso en uno de sus bastiones históricos: la Ciudad de Buenos Aires. La elección dejó en evidencia no sólo el avance de nuevas fuerzas políticas como La Libertad Avanza, sino también la irrupción de un electorado que exige respuestas distintas a las tradicionales, lo que obliga al macrismo a repensar su narrativa, su liderazgo y su estrategia territorial.