Antes de que se conozca algún resultado oficial de las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires, cientos de militantes del kirchnerismo se concentraron frente al departamento de la calle San José 1111, donde Cristina Kirchner se encuentra detenida en el marco de la causa Vialidad. La esquina porteña se llenó de vítores y expresiones de alegría ante la expectativa de un triunfo del peronismo, aunque la exmandataria no pudo presentarse como candidata.
La convocatoria fue organizada por La Cámpora y el Instituto Patria durante los días previos a los comicios, y se espera que Máximo Kirchner reciba allí los primeros datos. Según fuentes del peronismo consultadas por Clarín, se estima una ventaja de cerca de 10 puntos sobre la oposición, aunque oficialmente los resultados comenzarían a difundirse a partir de las 21, cuando se hayan escrutado al menos el 30% de las mesas.
En junio de 2025, Cristina Kirchner había anunciado su candidatura en la Tercera Sección Electoral, pero la confirmación de su condena judicial le impidió competir, lo que generó que sectores del peronismo consideraran que la vicepresidenta de Alberto Fernández había sido proscripta. Durante una entrevista con C5N, la exjefa de Estado aseguró: “Voy a ponerle el hombro para hacer la mejor elección”. Además, cuestionó el desdoblamiento de los comicios provinciales respecto de los nacionales, en un contexto de tensión con el gobernador Axel Kicillof.
Mientras tanto, en las redes sociales se multiplicaban los mensajes de apoyo, con publicaciones como la de Florencia Carignano, diputada santafesina, que señalaba: “Imagínense esta elección con @CFKArgentina candidata!!! y al que todavía le quedaba alguna duda, espero que entienda de una vez por todas por qué la metieron presa”. Antes de esto, había retuiteado un mensaje de una cuenta partidaria que afirmaba: “Si Cristina era candidata hoy se terminaba el gobierno”.
Durante la jornada, los referentes del peronismo adoptaron primero una “tensa calma”, seguida de una espera “optimista con responsabilidad”, ante los datos preliminares que indicaban un buen desempeño, especialmente en la Tercera Sección, pero también con resultados positivos en la Primera y Octava. Al caer la noche, comenzaban a organizarse dos celebraciones: una en el búnker platense de Axel Kicillof en el hotel Grand Brizo y otra en el departamento de Cristina Kirchner.
En el búnker del centro de La Plata, antes de la llegada del gobernador, se comentaba con cautela: “Preferimos esperar, pero lo que nos están pasando los intendentes es positivo”. Además, sobre la avenida 51 se había instalado un escenario con pantalla gigante para festejar el posible triunfo en cuanto se difundieran los resultados oficiales, reflejando la combinación de prudencia y entusiasmo que marcó la jornada kirchnerista.