En un contexto político marcado por tensiones entre la Nación y las provincias, un grupo de mandatarios provinciales decidió dar un paso estratégico de cara a las elecciones legislativas de octubre. Martín Llaryora (Córdoba), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Carlos Sadir (Jujuy), Ignacio Torres (Chubut) y Claudio Vidal (Santa Cruz) protagonizaron una reunión en la ciudad de Buenos Aires, en la sede de la Casa de Chubut, con el objetivo de consolidar una coalición electoral que les permita tener una representación conjunta en el Congreso Nacional.
Este encuentro no sólo apuntó a articular un frente político común, sino que también se dio en un momento clave: el presidente Javier Milei anunció recientemente su intención de vetar iniciativas legislativas vinculadas a la redistribución de recursos provenientes del impuesto a los combustibles y de los Adelantos del Tesoro Nacional (ATN), lo que generó preocupación en varias jurisdicciones.
Asimismo, esta articulación política se produce en el marco de una disputa más amplia entre el Gobierno central y diversas provincias por el reparto de fondos coparticipables, un tema que ha encendido la discusión federal durante los últimos meses.
Mediante un comunicado difundido tras el cónclave, los gobernadores reafirmaron su compromiso con una agenda federal y con la defensa activa de los intereses de sus respectivas provincias en el ámbito legislativo. En sus palabras, “el interior productivo necesita estar representado con voz propia en el Congreso, y nuestra responsabilidad es garantizar esa representación para fortalecer la gobernabilidad y el desarrollo del país”.
Subrayaron que tanto los gobiernos provinciales como el nacional han adoptado medidas de ajuste para alcanzar el equilibrio fiscal, algo que consideraron fundamental para asegurar una transformación económica duradera y sostenible. Pero además, señalaron que ese esfuerzo colectivo debe verse reflejado en avances concretos, en especial en materia de infraestructura: “El sacrificio de todos los argentinos debe traducirse en obras esenciales que potencien nuestras economías regionales, porque sólo desarrollando el interior es posible hacer crecer verdaderamente a la Nación”.
También plantearon la necesidad de promover el bienestar de la población, con oportunidades reales para los 47 millones de habitantes del país. Desde esta perspectiva, justificaron su decisión de competir unidos en los comicios de octubre, en busca de ocupar un rol más activo en la política nacional, especialmente en defensa de los sectores que generan empleo y riqueza en el interior del país.
Los gobernadores remarcaron que su visión se sustenta en el trabajo diario, en la gestión responsable de los recursos, en el impulso a la producción y en el compromiso con el progreso. Afirmaron estar dispuestos a enfrentar los desafíos del presente, con la mirada puesta en un futuro distinto, alejado de las divisiones y obstáculos que, según ellos, impidieron el avance del país en el pasado.
Finalmente, hicieron un llamado a construir una Argentina más justa, productiva y segura, sin enfrentamientos inútiles ni violencia, en la que todos los ciudadanos puedan acceder a una vida digna, con paz social, trabajo genuino y la posibilidad de proyectar sueños sin limitaciones. “Nuestra vocación es trabajar cada día por esa Argentina que todos anhelamos”, concluyeron.
