En medio del cada vez más evidente enfrentamiento interno dentro de La Libertad Avanza, la vicepresidenta Victoria Villarruel tomó una decisión contundente al presentar dos denuncias penales en los tribunales de Comodoro Py. Esta acción legal fue dirigida contra diversos referentes y comunicadores afines al oficialismo, a quienes la funcionaria acusa de participar en una supuesta campaña de hostigamiento en su contra, con el objetivo de apartarla del espacio de poder que ocupa actualmente dentro del Gobierno nacional.
Según informaron fuentes judiciales, las denuncias incluyen una serie de cargos graves como rebelión, amenazas, intimidación pública, asociación ilícita y atentados contra el orden público. Una de las figuras centrales señaladas en esta presentación judicial es Javier Negre, director del portal “La Derecha Diario”, medio que ha sido identificado como vocero del ala más radicalizada del mileísmo. Villarruel sostiene que desde ese sitio se viene desplegando una estrategia sistemática de difamación en su contra.
La vicepresidenta manifestó en la denuncia que Negre y su medio la acusan públicamente de cometer delitos extremadamente graves, como traición a la patria e intento de golpe de Estado, al tiempo que la responsabilizan de conspirar contra el presidente Javier Milei. Además, denunció que desde ese portal se divulgan informaciones falsas con la intención de dañar su imagen pública y debilitar su posición dentro del Ejecutivo.
Paralelamente, Villarruel realizó una segunda presentación que involucra a actores del llamado “ecosistema digital libertario”. Entre los acusados figuran la diputada Lilia Lemoine, el escritor Nicolás Márquez —autor de la biografía del presidente— y diversas cuentas de redes sociales, muchas de las cuales operarían como “trolls” vinculados al oficialismo. Todos ellos son señalados por formar parte de una red que, según la denuncia, busca instalar un discurso hostil en su contra, mediante intimidaciones, escraches y la diseminación de contenidos agraviantes.
La respuesta desde los sectores denunciados no tardó en llegar. Desde el portal La Derecha Diario se defendieron afirmando que las acciones de Villarruel no son más que una represalia política. «Nos ataca porque expusimos públicamente sus traiciones a Milei», señalaron voceros del medio, profundizando así el clima de tensión en el oficialismo.
Las causas fueron sorteadas y terminaron en el juzgado federal de Sebastián Casanello, quien, de acuerdo con trascendidos, decidió delegar la instrucción en los fiscales Franco Picardi y Guillermo Marijuan. Ambos serán ahora los encargados de avanzar en las primeras medidas procesales, analizar el alcance de las pruebas presentadas y definir si corresponde iniciar una investigación formal sobre los acusados.
Este episodio marca un nuevo hito en la fractura interna del espacio libertario, que parece intensificarse con el correr de los días, dejando al descubierto profundas disputas de poder dentro del oficialismo nacional.