La Fiscalía de Delitos Complejos, bajo la dirección de Mariana Rivadeneira, llevó a cabo este jueves 25 de septiembre una audiencia destinada a formalizar cargos y solicitar medidas de coerción contra un agente policial de 32 años, acusado de haber ejercido violencia física contra una mujer durante un procedimiento de aprehensión.
Mónica Torchán, auxiliar de la fiscalía, imputó al oficial los delitos de apremios ilegales y vejaciones agravadas, considerando que las lesiones ocasionadas fueron graves y que actuó en calidad de autor.
Según la teoría del caso, el incidente ocurrió el 20 de octubre de 2022, aproximadamente a las 20:20 horas, cuando el imputado, prestando servicio en la Comisaría de Villa Mariano Moreno junto con otros efectivos, intervino en un local comercial situado en la intersección de las calles 6 y 15 de dicha localidad. Durante este operativo, se dispuso la detención de dos mujeres.
Durante el procedimiento, el policía habría hecho un uso desmedido de la fuerza al aprehender a una de las mujeres, golpeándola con los puños. Posteriormente, ya dentro de la comisaría, la víctima fue trasladada a una habitación donde el imputado continuó agrediéndola físicamente en distintas partes del cuerpo.
Como consecuencia de estas agresiones, la mujer sufrió un traumatismo maxilofacial con fractura de los huesos propios, lesiones que requirieron intervención quirúrgica y que le ocasionaron un tiempo de recuperación e incapacidad superior a un mes.
Tras detallar las pruebas recabadas por la Fiscalía, Torchán solicitó la imposición de medidas cautelares de menor intensidad, consistentes en reglas de conducta por un periodo de seis meses.
Luego de un cuarto intermedio destinado a resolver, la jueza aceptó parcialmente el pedido de la fiscalía, imponiendo las medidas, pero limitando su duración a tres meses.
