Una grave tragedia aérea sacudió este sábado al estado de Santa Catarina, Brasil, cuando un globo aerostático que transportaba a más de 20 personas se incendió en pleno vuelo y terminó desplomándose al vacío. El siniestro ocurrió en la localidad de Praia Grande, y dejó como saldo al menos ocho víctimas fatales. Las imágenes del incidente rápidamente se difundieron en redes sociales, mostrando la violencia de las llamas y el momento en que algunos pasajeros intentaron desesperadamente salvarse.
El gobernador del estado, Jorginho Mello, fue quien confirmó públicamente las muertes a través de un video difundido en sus cuentas oficiales. «Lamentamos profundamente el accidente con un globo esta mañana en Praia Grande», expresó, y detalló que equipos de emergencia se encontraban trabajando en la zona desde los primeros minutos posteriores al impacto. También aseguró que el gobierno de Santa Catarina se comprometía a brindar asistencia total a las familias de las víctimas.
Además de los fallecidos, se informó que dos personas sobrevivieron con heridas, mientras que otras trece lograron salir con vida del desastre, lo que generó sorpresa dada la magnitud del incendio. Las autoridades locales continúan monitoreando la situación y reforzaron la presencia de personal médico y de rescate en el lugar.
En paralelo, la Policía Civil ha iniciado una investigación formal para esclarecer las causas del siniestro, aunque por el momento no se ha determinado qué originó el fuego que consumió la aeronave. De acuerdo a las imágenes captadas por testigos presenciales, el globo parecía ascender sin inconvenientes bajo un cielo despejado y condiciones climáticas favorables, sin vientos intensos que pudieran haber dificultado el vuelo.
No obstante, en uno de los videos más impactantes del hecho, se observa cómo el quemador de gas propano —el sistema que permite mantener el globo en el aire— comienza a arrojar llamas de forma irregular. Instantes después, las llamas se intensifican de forma peligrosa, generando pánico a bordo. La grabación muestra cómo una persona, visiblemente desesperada, intenta sostenerse desde el borde de la canasta, hasta que pierde el equilibrio y cae al vacío. Esa escena, difundida ampliamente en redes, se volvió símbolo del horror que vivieron los pasajeros en los últimos instantes del vuelo.
Las investigaciones se centran ahora en determinar si hubo una falla técnica en el quemador o una manipulación indebida que haya provocado la ignición del gas propano. La prioridad de las autoridades es reconstruir los hechos minuto a minuto, con base en los testimonios de los sobrevivientes y las grabaciones disponibles.
Mientras tanto, el país entero permanece conmocionado por lo ocurrido, y múltiples muestras de apoyo han llegado desde distintos sectores sociales, en solidaridad con los familiares de las víctimas. La tragedia deja también en el aire nuevos interrogantes sobre los controles de seguridad en este tipo de actividades turísticas, muy populares en zonas rurales del sur de Brasil.