En las cercanías de lo que queda del Mercado Persia, devastado por un incendio, se ha registrado un aumento considerable de la tensión. La situación se desencadenó cuando los hijos de la administradora del lugar hicieron acto de presencia, generando un ambiente cargado de amenazas.
La presencia persistente de los reporteros en la zona fue testigo de un episodio desagradable. Los hijos de la propietaria, con un tono amenazador, confrontaron a los periodistas y a los vendedores presentes. La situación se deterioró rápidamente, dando lugar a insultos y agresiones por parte de los jóvenes hacia los representantes de la prensa, así como a acaloradas discusiones con los comerciantes.
Entre los periodistas agredidos se encuentra Álvaro Mejuto, quien relató la experiencia de manera directa. Según Mejuto, los hijos de la administradora se estaban mofando de los trabajadores, lo que motivó su intervención. Al acercarse y formular una pregunta, el periodista fue atacado por uno de los jóvenes, quien comenzó a golpearlo con el micrófono. Este comportamiento agresivo, según Mejuto, provenía de los hijos de la persona encargada de cobrar a los vendedores ambulantes del mercado. La situación refleja un ambiente tenso y conflictivo en el área afectada por el incendio.