La acusada, aprovechándose de la necesidad de vivienda de varias personas, logró engañarlas prometiendo elaborar una carpeta o expediente que presentaría al Instituto Provincial de la Vivienda (IPV). Les aseguró a las víctimas que, en pocos meses, les entregaría una vivienda a cambio de sumas de dinero y bienes valiosos.
Hoy, jueves 25 de julio, se llevó a cabo un acuerdo de juicio abreviado en el que la acusada, de 50 años, admitió su culpabilidad en los seis cargos que se le imputaban. La Unidad Fiscal de Delitos Complejos, bajo la dirección de Mariana Rivadeneira, solicitó una condena de tres años de prisión de ejecución condicional para la acusada, considerándola autora responsable de seis delitos de estafa.
El juez encargado del caso aprobó los términos del acuerdo alcanzado entre las partes. La auxiliar Mónica Torchán, en representación de la Unidad Fiscal de Instrucción (UFI), presentó el convenio completo y solicitó que la acusada cumpla con ciertas reglas de conducta durante el mismo período de la condena, además de una compensación económica para las víctimas, estimada en más de $5.000.000.
Según la acusación, los delitos se cometieron entre 2021 y 2023. Durante este tiempo, la acusada engañó a las víctimas con la promesa de prepararles un expediente para el IPV, donde afirmaba tener contactos, asegurándoles que en unos meses les entregaría una vivienda. A cambio, recibió dinero y otros bienes, perjudicando económicamente a sus víctimas.