Durante una transmisión en vivo desde su residencia en Mar-a-Lago, Florida, Donald Trump, ex presidente de Estados Unidos y actual candidato presidencial republicano, hizo una declaración notable. Trump informó que había escuchado rumores sobre un posible ataque de Irán a Israel previsto para la noche del lunes. Este comentario lo hizo mientras hablaba con el streamer y gamer Adin Ross, aunque el propio Trump aclaró que no contaba con información secreta sobre el supuesto ataque.
Trump expresó: “Estoy escuchando que va a haber un ataque esta noche por parte de Irán; Israel va a ser atacado esta noche. Se los digo ahora mismo, lo escucho solo a través de las mismas ondas, no hay información secreta”. En ese contexto, Trump aprovechó para hacer una afirmación sobre su propia administración, sugiriendo que, si él estuviera en el cargo, tales ataques no ocurrirían. “Si yo fuera el presidente nadie estaría siquiera diciendo esa palabra (ataque), porque eso no pasaría. Al 100 por ciento,” argumentó Trump.
Hasta ahora, ni Estados Unidos ni Israel han confirmado públicamente la posibilidad de un ataque inminente por parte de Irán. Las tensiones se han intensificado debido a las amenazas de Irán de represalias por el asesinato del líder de Hamas, Ismail Haniyeh, en Teherán, al cual Irán atribuye a Israel. Las milicias regionales que Irán ha armado durante décadas podrían jugar un papel importante en cualquier ataque potencial.
En abril, tras un ataque israelí contra la embajada iraní en Siria, Irán respondió lanzando 170 drones con bombas, más de 30 misiles de crucero y más de 120 misiles balísticos hacia Israel. Muchos de estos proyectiles fueron interceptados por Israel, Estados Unidos y otros países, aunque algunos provinieron de Yemen.
Irán podría repetir un ataque similar, y esta vez, Hezbollah podría involucrarse en respuesta al asesinato del comandante senior Fouad Shukur por parte de Israel la semana pasada. Tal ofensiva podría debilitar las defensas aéreas de Israel, resultando en un aumento de ataques con misiles y un mayor riesgo de víctimas, además de una posible escalada hacia una guerra regional más amplia.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, describió la situación como una “guerra en varios frentes” contra Irán y sus aliados, mientras Estados Unidos y otros países se preparan para apoyar a Israel ante cualquier represalia. Las tensiones han aumentado considerablemente después de casi 10 meses de guerra en Gaza y los recientes asesinatos de altos comandantes de Hezbollah en Líbano y de Hamas.
Netanyahu aseguró que Israel está listo para cualquier eventualidad. En un esfuerzo por mitigar la crisis, el ministro de Asuntos Exteriores de Jordania, Ayman Safad, realizó una visita a Irán con el objetivo de calmar la situación. “Queremos que termine la escalada,” declaró Safad.
Mientras tanto, el Pentágono ha desplegado importantes recursos militares en la región. Jon Finer, asesor adjunto de seguridad nacional de la Casa Blanca, aseguró a ABC: “Estamos haciendo todo lo posible para asegurarnos de que esta situación no se desborde.”
En Israel, se han preparado refugios antiaéreos en previsión de posibles ataques. El domingo, un ataque con arma blanca cerca de Tel Aviv resultó en la muerte de una mujer de alrededor de 70 años y un hombre de 80 años, con otras dos personas heridas. La policía informó que el ataque fue perpetrado por un palestino que fue “neutralizado”.
En Gaza, el Ministerio de Salud reportó que al menos 25 personas murieron y otras 19 resultaron heridas debido a ataques israelíes a dos escuelas en Ciudad de Gaza. Un video de la agencia de noticias AP mostró al menos un niño entre las víctimas. El ejército israelí afirmó que los ataques estaban dirigidos a centros de mando de Hamas.
