La reciente participación de Ricardo Darín en el programa de Mirtha Legrand generó una fuerte repercusión, tanto en redes sociales como en el ámbito político. Durante la emisión del sábado pasado, la reconocida conductora le pidió su opinión sobre las nuevas disposiciones económicas implementadas por el Gobierno nacional. En respuesta, el actor se mostró dubitativo respecto del efecto real que estas políticas puedan tener sobre el día a día de los trabajadores. Para ilustrar su escepticismo, Darín recurrió a un ejemplo de su experiencia personal: “Fui a comer empanadas con unos amigos y me cobraron 48.000 pesos la docena”, comentó.
Este tipo de declaraciones, cuando provienen de figuras públicas y no coinciden con la línea del oficialismo, suelen desatar una rápida oleada de reacciones en redes. En este caso no fue diferente: numerosas cuentas criticaron al intérprete por sus palabras, acusándolo de exagerar o de tener desconocimiento sobre los precios reales. El revuelo llegó a tal punto que el propio ministro de Economía, Luis Caputo, decidió referirse al tema públicamente.
El domingo, durante su presencia en el programa La Cornisa, conducido por Luis Majul en LN+, Caputo expresó su sorpresa y molestia por los dichos de Darín. “Terrible lo de Darín. Una sorpresa. Es un tipo que aprecio. Y perdón por la sinceridad, pero me dio vergüencita ajena”, confesó el funcionario, visiblemente incómodo. Luego agregó con tono crítico: “Se quiso hacer el nacional y popular y dijo una estupidez que todavía lo están gastando en las redes”.
La propia conductora del ciclo televisivo se sumó al comentario del ministro, afirmando que “los precios son terribles”. Sin embargo, Darín había añadido durante su intervención: “No termino de comprender lo que está pasando. Hay mucha gente que realmente la está pasando muy mal”. Esta afirmación intentaba subrayar el trasfondo social que motivaba su reflexión.
Caputo, por su parte, puso en duda la veracidad del monto que mencionó el actor, insinuando que, en caso de que efectivamente haya pagado esa suma, se trataría de un local exclusivo o gourmet. “Todo bien si puede pagar empanadas más caras. Pero no valen eso, Ricardito”, afirmó con sorna. Para reforzar su postura, comparó el comentario de Darín con una situación hipotética: “Es como si mañana vas a Porsche y le decís a Mirtha: ‘Los autos salen 200 mil dólares’”.
Ante la magnitud del debate generado, Darín fue abordado este lunes por un movilero del programa Intrusos, mientras caminaba junto a su esposa Florencia Bas y su hija Clara por su barrio. Sin esquivar el tema, el actor accedió a dar su versión de los hechos.
“Cada uno entiende lo que quiere. Si se presta atención, se comprende el sentido de lo que dije. Claro que hay empanadas más baratas o más caras, eso varía según el lugar. Pero lo importante era destacar que los precios están altísimos y eso es algo que la gente sabe”, explicó Darín al ser entrevistado por Intrusos, conducido por Rodrigo Lussich y Adrián Pallares.
Asimismo, negó que su comentario haya tenido intenciones políticas o ataques personales: “No dije nada contra el Gobierno, ni contra el señor Caputo, que me llamó ‘Ricardito’… algo que me parece bastante despectivo viniendo de un funcionario en democracia”, subrayó. Luego añadió: “Yo no lo traté mal, ni lo conozco. No entiendo por qué me dijo ‘Ricardito’ ni por qué afirmó que ‘lo que dije es una estupidez’. Con eso me está tratando de estúpido”.
Para Darín, ese tipo de actitudes no son apropiadas para un funcionario público, pero aseguró no querer profundizar en la polémica. “Más allá de eso, lo interesante es ver hasta qué punto muchas personas están cargadas emocionalmente, con tanta bronca acumulada, que terminan interpretando todo con odio. Se proyecta demasiado en las redes”, reflexionó.
El actor también manifestó su preocupación por el impacto que estas reacciones pueden tener en la libertad de expresión: “Lo peligroso es que si uno empieza a tener miedo de expresar lo que piensa, siempre con respeto y sin insultar, como hizo este señor, se empieza a callar. Y eso es muy negativo, porque vivimos en democracia. Y la democracia hay que cuidarla”.
Aseguró que su intención nunca fue faltar el respeto, ni al Gobierno ni a Caputo, y recordó que siempre ha mostrado respeto institucional, incluso cuando no estuvo de acuerdo con las autoridades de turno. “Hay que cuidar las formas. Eso es algo que, normalmente, viene de arriba hacia abajo. Si desde las altas esferas no hay respeto, se vuelve difícil mantenerlo entre los ciudadanos”, concluyó.
Reconociendo que quizá fue un error mencionar una cifra específica, Darín admitió que pudo haber sido imprudente en ese aspecto. “Tal vez fue una tontería ponerle un número, porque es cierto, no todas las empanadas cuestan eso. Pero en muchos lugares sí. Y varias personas lo compartieron en redes para defenderme, lo cual agradezco mucho”, finalizó el protagonista de El secreto de sus ojos, reafirmando que su mensaje iba más allá de una simple anécdota gastronómica.