Tras la última Cadena Nacional en la que el presidente Javier Milei defendió enfáticamente su política económica y anunció una serie de medidas destinadas a “blindar” el equilibrio fiscal, Cristina Fernández de Kirchner lanzó duras críticas desde sus redes sociales. La ex mandataria cuestionó de forma directa el discurso del jefe de Estado, al que calificó como “mentiroso”, y sugirió que el final de su gestión podría verse envuelto en circunstancias controvertidas.
En un mensaje publicado en su cuenta de X, Cristina reaccionó con una frase cargada de ironía y confrontación: “Che Milei… Acabo de escuchar tu cadena nacional de anoche, y disculpame… pero más que con los pies para adelante, a vos te van a sacar con un chaleco de fuerza de la Rosada”. Con esta expresión, la ex presidenta aludió a uno de los momentos más fuertes de la alocución presidencial, cuando Milei advirtió que no retrocederá en sus reformas económicas ni en el ajuste, incluso si eso implicara llegar a un extremo.
Desde su residencia en San José 111, donde cumple prisión domiciliaria, la ex jefa de Estado puso en duda los datos que el mandatario presentó sobre la presunta recuperación del poder adquisitivo. Mientras Milei aseguró que los salarios “le ganaron a la inflación” y que el consumo de alimentos mostró una mejora, Cristina respondió con tono irónico y cuestionador. Además, lo acusó de falsear información respecto a la emisión monetaria: «Venís emitiendo a diestra y siniestra para pagar los intereses de la timba financiera, de las operaciones con dólar futuro y las tasas bancarias para que los pesos no se vayan al dólar”.
A criterio de la ex presidenta, el incremento histórico en el pago de intereses no se financia con recursos genuinos, sino con dinero emitido: “No es con chupetines, Milei. Es con plata que imprimen”. También apuntó contra el círculo de colaboradores del mandatario, en especial contra el ministro de Economía: “¿Y quién se lleva esa emisión? Los mismos de siempre… Los que tienen su mejor representante en tu Ministro de Economía”. Para ella, el ajuste actual no favorece al conjunto de la población, sino que otorga ventajas a los grandes actores financieros.
En otro tramo de su publicación, Cristina Kirchner contrapuso su propia gestión comunicacional con la del actual presidente: “Mis cadenas nacionales nunca fueron para quitar derechos ni arruinarle la vida a nadie. Siempre fueron para mejorar la vida de mis compatriotas”, afirmó, instalando así la idea de que sus mensajes buscaban beneficios sociales, mientras que los de Milei apuntarían a sostener políticas de ajuste.
Por su parte, el mensaje que originó esta controversia tuvo un tono desafiante. Milei presentó un balance de los primeros meses de su gobierno y lanzó dos propuestas concretas para asegurar el equilibrio fiscal:
- Prohibición legal de financiar el gasto primario con emisión monetaria, lo que impediría que el Tesoro solicite préstamos al Banco Central para cubrir gastos corrientes.
- Proyecto de ley de responsabilidad fiscal, que sancionaría la aprobación de presupuestos con déficit y obligaría a recortar partidas en caso de querer incrementar otras.
En su intervención, el presidente explicó: “Cada peso nuevo que quieran gastar tiene que tener un nombre y un apellido, tienen que decir de dónde sale y a quién se le quita”. Según advirtió, la ausencia de financiamiento externo obliga a que cualquier gasto adicional se cubra mediante emisión o aumento de impuestos, lo que, en su visión, desembocaría en hiperinflación, pobreza y conflictividad social.
Sin embargo, la frase que más repercusión tuvo y que encendió la respuesta de Cristina fue cuando afirmó: “Si quieren volver atrás, me van a tener que sacar con los pies para adelante”. Con estas palabras, Milei dejó en claro que no tiene intención de dar marcha atrás con sus políticas, aunque en redes sociales generó una ola de comentarios, siendo la respuesta de la ex presidenta —con su referencia al “chaleco de fuerza”— una de las más resonantes.
