Un agricultor de Delfín Gallo reportó a la comisaría local el robo de seis cerdos que había adquirido para iniciar un negocio de producción de carne porcina. La policía, liderada por los comisarios Julio Leal y Carlos Ruiz, inició una investigación para recuperar los animales, y descubrieron que los ladrones podrían haber intercambiado los cerdos por drogas.
Con una orden judicial, realizaron un allanamiento en una casa precaria en las afueras de la localidad, en el asentamiento San Juan. Allí, además de recuperar tres cerdos, encontraron 366 dosis de pasta base listas para la venta, lo que resultó en la detención de tres mujeres.